Mientras seguimos de descanso en el blog, jamás olvidado, les presento una producción uruguaya de videojuegos, un video de excelente calidad de casi una hora, sobre uno de los más emblemáticos juegos de pelea de Arcade y Super NES. Vale la pena verlo, a mi me enganchó de principio a fin, y eso que no soy muy fanático de esta serie de juegos. Disfruten!
miércoles, 25 de diciembre de 2013
domingo, 16 de junio de 2013
Portable Reviews: New Super Mario Bros.
Hoy volvemos con la sección de Portable Reviews, que hace tiempo que estaba sin recibir ningún artículo, y esta vez vamos a dedicarle un espacio a un juego de DS que es un verdadero “must have” para aquellos que quieran tener una colección digna de la consola.
Se trata de un retorno a lo clásico de la saga Mario, sin dejar de lado los avances técnicos que permiten un juego visualmente muy llamativo. El nombre del juego lo dice todo, se trata de un Super Mario Bros., pero nuevo, por eso New Super Mario Bros.
NSMB, como lo abreviaré a partir de ahora, salió al mercado en mayo de 2006, proponiendo algo nuevo e interesante que podría enganchar a jugadores actuales y a aquellos que supieron disfrutar de los juegos de NES y Super NES, es decir, un Mario en 2D plataformero totalmente nuevo. Interesante.
Comenzando esta vez con la música, decir que es tal cual lo que nos tiene acostumbrado Nintendo en un juego de Mario: música alegre, pegadiza, y demás. Por suerte los efectos de sonido como los gritos constantes de Mario no son tan molestos como pueden ser en algún otro juego, por lo que el apartado sonoro del título es muy bueno, con melodías decentes, y alguna que otra oculta por ahí que realmente destaca.
El entorno gráfico es formidable. El juego está compuesto por escenarios en 3D con una vista 2D, como pueden ver en las fotos. Y aunque tengo la sensación de que los enemigos como los goombas y los copas son realmente gráficos pre-renderizados (como los de Donkey Kong Country), Mario está diseñado en total 3D, por lo que la cantidad de movimientos que tiene es bastante grande.
Más allá de estos aspectos técnicos, el diseño y colorido de niveles es muy bueno, sumándole a eso que, como ya es costumbre, Mario irá avanzando a través de diferentes mundos temáticos, como el desierto, la pradera, la zona helada, etc., que hará que el recorrido sea bastante variado y digno de apreciar.
La jugabilidad se mantiene tal cual como era en los juegos de Mario en 2D de antaño, agregando algunos elementos nuevos en las habilidades de Mario, como la posibilidad de arrastrarse por las paredes para saltar (algo parecido a la habilidad de MegaMan X), el triple salto, la posibilidad de caer con fuerza sentado, entre otras.
Mario deberá ir avanzando a través de ocho mundos, divididos en varios niveles, cada uno con su nivel de dificultad, que desgraciadamente no es tan alta. Es decir, los jugadores que ya estén acostumbrados probablemente pierdan vidas por ir apurados y no prestar total atención, ya que no es un juego muy difícil que digamos, y aunque quizás algunos niveles propongan un reto bastante grande, la cantidad de vidas que se pueden ir recolectando a medida que jugamos es más que suficiente como para olvidarse de la existencia de un cartel de “Game Over”.
En estas escenas encontrarán tres “monedas estrella”, que servirán para completar el juego al 100% y para abrir nuevos caminos en los mundos, que están conformados por los diferentes niveles (ya sean normales, de agua, cuevas, torres, castillos, casas embrujadas laberínticas, etc.), y las casa-hongos (como las de SMB3) en la que jugarán diferentes tipos de bonus para conseguir vidas o power ups.
En cuanto a power ups, el juego presenta los ya clásicos hongos, flores de fuego y estrellas, y presenta tres elementos nuevos: el hongo gigante, que como muestra la portada americana del juego, hace gigante a Mario, pudiendo así destrozar todo el escenario, y mientras más destrozos provoque, más vidas dará al terminarse el poder; por otro lado, en el otro extremo, está el honguito diminuto, ideal para pasar por lugares estrechos, entrar a tubos estrechos y correr por encima del agua. El tercer elemento nuevo es la caparazón azul, que le da la habilidad a Mario de convertirse en un Koopa, una tortuguita que le permitirá esconderse en su caparazón para avanzar invenciblemente a toda velocidad, aunque su verdadero propósito, al igual que el hongo diminuto, es acceder a lugares especiales.
Es que el juego está lleno de secretos y salidas secretas de los niveles. Ya sea para acceder a niveles extra de cada mundo, como también para poder tomar todas las monedas estrellas y completar el 100% del juego.
Otro elemento que me sorprendió de la jugabilidad es que el diseño de las pantallas no es tan simple como creía, lo que va de la mano con la presencia de tantos secretos que mencionaba antes. Debo admitir que no le tenía mucha fe a este juego, pero que igual me resultaba llamativo. No le tenía fe porque realmente pensaba que el diseño de las pantallas era como el del primer Super Mario Bros. de NES, es decir, rectas, hacia delante, con elementos nuevos y llamativos con ayuda del 3D. Pero no, las escenas las hay de todo tipo, haciendo recordar más bien a Super Mario Bros. 3.
Otro punto a favor y que a mi me sorprendió (y que ni siquiera sabía/recordaba su existencia) son los minijuegos.
Estos se dividen en varias categorías: acción, puzzle, mesa, duelos y variados, los hay para jugar individual, o en multijugador, por lo que los hay de todo tipo.
Teniendo en cuenta el año en que salió el juego y demás, parece que el verdadero propósito de estos minijuegos es hacer uso de la pantalla táctil de la DS, equilibrando el poco uso que se le da a esta pantalla en el juego normal. Por lo que todos los juegos se manejarán con el lápiz hasta que salgamos de esta sección.
Y los minijuegos en realidad son para pasar el rato, son ideales para ir al baño (?), para ratos de espera, para momentos antes de dormir, etc., porque son simples, en su gran mayoría, son propuestas muy simples y poco originales, protagonizadas por personajes y elementos de la saga de Mario, y los hay de todo tipo, desde juegos de cartas, encontrar los pares usando la memoria, otro en el que deben dibujar trampolines para que Mario no caiga, otro de “encuentra al personaje”, hasta uno de poker.
Se trata de un retorno a lo clásico de la saga Mario, sin dejar de lado los avances técnicos que permiten un juego visualmente muy llamativo. El nombre del juego lo dice todo, se trata de un Super Mario Bros., pero nuevo, por eso New Super Mario Bros.
NSMB, como lo abreviaré a partir de ahora, salió al mercado en mayo de 2006, proponiendo algo nuevo e interesante que podría enganchar a jugadores actuales y a aquellos que supieron disfrutar de los juegos de NES y Super NES, es decir, un Mario en 2D plataformero totalmente nuevo. Interesante.
Comenzando esta vez con la música, decir que es tal cual lo que nos tiene acostumbrado Nintendo en un juego de Mario: música alegre, pegadiza, y demás. Por suerte los efectos de sonido como los gritos constantes de Mario no son tan molestos como pueden ser en algún otro juego, por lo que el apartado sonoro del título es muy bueno, con melodías decentes, y alguna que otra oculta por ahí que realmente destaca.
El entorno gráfico es formidable. El juego está compuesto por escenarios en 3D con una vista 2D, como pueden ver en las fotos. Y aunque tengo la sensación de que los enemigos como los goombas y los copas son realmente gráficos pre-renderizados (como los de Donkey Kong Country), Mario está diseñado en total 3D, por lo que la cantidad de movimientos que tiene es bastante grande.
Más allá de estos aspectos técnicos, el diseño y colorido de niveles es muy bueno, sumándole a eso que, como ya es costumbre, Mario irá avanzando a través de diferentes mundos temáticos, como el desierto, la pradera, la zona helada, etc., que hará que el recorrido sea bastante variado y digno de apreciar.
La jugabilidad se mantiene tal cual como era en los juegos de Mario en 2D de antaño, agregando algunos elementos nuevos en las habilidades de Mario, como la posibilidad de arrastrarse por las paredes para saltar (algo parecido a la habilidad de MegaMan X), el triple salto, la posibilidad de caer con fuerza sentado, entre otras.
Mario deberá ir avanzando a través de ocho mundos, divididos en varios niveles, cada uno con su nivel de dificultad, que desgraciadamente no es tan alta. Es decir, los jugadores que ya estén acostumbrados probablemente pierdan vidas por ir apurados y no prestar total atención, ya que no es un juego muy difícil que digamos, y aunque quizás algunos niveles propongan un reto bastante grande, la cantidad de vidas que se pueden ir recolectando a medida que jugamos es más que suficiente como para olvidarse de la existencia de un cartel de “Game Over”.
En estas escenas encontrarán tres “monedas estrella”, que servirán para completar el juego al 100% y para abrir nuevos caminos en los mundos, que están conformados por los diferentes niveles (ya sean normales, de agua, cuevas, torres, castillos, casas embrujadas laberínticas, etc.), y las casa-hongos (como las de SMB3) en la que jugarán diferentes tipos de bonus para conseguir vidas o power ups.
En cuanto a power ups, el juego presenta los ya clásicos hongos, flores de fuego y estrellas, y presenta tres elementos nuevos: el hongo gigante, que como muestra la portada americana del juego, hace gigante a Mario, pudiendo así destrozar todo el escenario, y mientras más destrozos provoque, más vidas dará al terminarse el poder; por otro lado, en el otro extremo, está el honguito diminuto, ideal para pasar por lugares estrechos, entrar a tubos estrechos y correr por encima del agua. El tercer elemento nuevo es la caparazón azul, que le da la habilidad a Mario de convertirse en un Koopa, una tortuguita que le permitirá esconderse en su caparazón para avanzar invenciblemente a toda velocidad, aunque su verdadero propósito, al igual que el hongo diminuto, es acceder a lugares especiales.
Es que el juego está lleno de secretos y salidas secretas de los niveles. Ya sea para acceder a niveles extra de cada mundo, como también para poder tomar todas las monedas estrellas y completar el 100% del juego.
Otro elemento que me sorprendió de la jugabilidad es que el diseño de las pantallas no es tan simple como creía, lo que va de la mano con la presencia de tantos secretos que mencionaba antes. Debo admitir que no le tenía mucha fe a este juego, pero que igual me resultaba llamativo. No le tenía fe porque realmente pensaba que el diseño de las pantallas era como el del primer Super Mario Bros. de NES, es decir, rectas, hacia delante, con elementos nuevos y llamativos con ayuda del 3D. Pero no, las escenas las hay de todo tipo, haciendo recordar más bien a Super Mario Bros. 3.
Otro punto a favor y que a mi me sorprendió (y que ni siquiera sabía/recordaba su existencia) son los minijuegos.
Estos se dividen en varias categorías: acción, puzzle, mesa, duelos y variados, los hay para jugar individual, o en multijugador, por lo que los hay de todo tipo.
Teniendo en cuenta el año en que salió el juego y demás, parece que el verdadero propósito de estos minijuegos es hacer uso de la pantalla táctil de la DS, equilibrando el poco uso que se le da a esta pantalla en el juego normal. Por lo que todos los juegos se manejarán con el lápiz hasta que salgamos de esta sección.
Y los minijuegos en realidad son para pasar el rato, son ideales para ir al baño (?), para ratos de espera, para momentos antes de dormir, etc., porque son simples, en su gran mayoría, son propuestas muy simples y poco originales, protagonizadas por personajes y elementos de la saga de Mario, y los hay de todo tipo, desde juegos de cartas, encontrar los pares usando la memoria, otro en el que deben dibujar trampolines para que Mario no caiga, otro de “encuentra al personaje”, hasta uno de poker.
Y por último, algo que también merece un párrafo aparte es el juego en modo multijugador, ya mencionado brevemente en el párrafo anterior, cuando hablé de los minijuegos, pero NSMB también tiene modos multijugador muy interesantes en los que competirán con otros en diferentes modos de juego, ya sea usando el modo “Descarga DS” (usando un solo cartucho), o teniendo cada uno su propio juego. El modo es “Mario vs. Luigi”, y tendrán cinco escenarios para competir, ganando el que consiga más estrellas.
Es un modo divertido, realmente, pero a la larga terminan resultando pocos escenarios.
Muchas opiniones se pueden leer respecto a este juego. Algunos creen que es corto, que tiene pocos minijuegos, que el modo multijugador es limitado, etc. La cosa no es tan simple; hasta hay trucos para jugar con Luigi o para un modo desafío.
A mí realmente me ha sorprendido bastante. Lo jugué hace mucho tiempo en emulador, y recuerdo no haberlo terminado, aunque no recuerdo hasta dónde había llegado.
Igual, la emulación de DS me parece malísima, y creo que para disfrutar de sus juegos hay que hacerlo en su consola original.
A esto le sumamos las cosas que escribí más arriba, es decir, escenarios con buenos diseños, cantidad de minijuegos divertidos, un modo multijugador igual de entretenido, y otros tantos elementos hacen que este juego me haya sorprendido por ser bastante mejor que lo que recordaba. No sé si sería comparable con la edición de Wii (que tendrá review en un tiempo) o las nuevas de 3DS y WiiU (que no he jugado aún), pero sí puedo decir que tiene elementos que lo hacen bastante bueno, y más tomando en cuenta que es el primero de esta “sub-saga New”. La única pega, quizás, es que no permite guardar cuando quieres, sino que tienes que hacer ciertas cosas (pasar una torre/castillo o desbloquear algún camino).
Tiene algunas carencias, o eso me parece, al menos, como por ejemplo la imposibilidad de grabar cuando uno desee, o la posibilidad de tener cierto “inventario” de power ups recolectados para usarlos cuando uno quiera, como ocurría con el Super Mario Bros. 3. Pero no sé. Grabar cuando uno desea no le quita dificultad, ya que la dificultad del juego radica en el pasaje de las escenas en sí, y sobre el inventario, SMB3 tenía su dificultad (incluso más alta que la de este juego) y sin embargo podíamos seleccionar objetos que íbamos obteniendo. Pero bueno, si le vemos el lado positivo a este aspecto, el juego nos obliga a buscar y rebuscar en escenas ya terminadas para poder encontrar el objeto exacto (que generalmente es el mini Mario o el caparazón azul) para poder pasar por lugares inaccesibles de las escenas y así encontrar sus salidas secretas y demás.
No es el juego perfecto, pero hay que probarlo, sin dudas. Es una gran opción. Le podría un 8.
Hasta la próxima.
Es un modo divertido, realmente, pero a la larga terminan resultando pocos escenarios.
Muchas opiniones se pueden leer respecto a este juego. Algunos creen que es corto, que tiene pocos minijuegos, que el modo multijugador es limitado, etc. La cosa no es tan simple; hasta hay trucos para jugar con Luigi o para un modo desafío.
A mí realmente me ha sorprendido bastante. Lo jugué hace mucho tiempo en emulador, y recuerdo no haberlo terminado, aunque no recuerdo hasta dónde había llegado.
Igual, la emulación de DS me parece malísima, y creo que para disfrutar de sus juegos hay que hacerlo en su consola original.
A esto le sumamos las cosas que escribí más arriba, es decir, escenarios con buenos diseños, cantidad de minijuegos divertidos, un modo multijugador igual de entretenido, y otros tantos elementos hacen que este juego me haya sorprendido por ser bastante mejor que lo que recordaba. No sé si sería comparable con la edición de Wii (que tendrá review en un tiempo) o las nuevas de 3DS y WiiU (que no he jugado aún), pero sí puedo decir que tiene elementos que lo hacen bastante bueno, y más tomando en cuenta que es el primero de esta “sub-saga New”. La única pega, quizás, es que no permite guardar cuando quieres, sino que tienes que hacer ciertas cosas (pasar una torre/castillo o desbloquear algún camino).
Tiene algunas carencias, o eso me parece, al menos, como por ejemplo la imposibilidad de grabar cuando uno desee, o la posibilidad de tener cierto “inventario” de power ups recolectados para usarlos cuando uno quiera, como ocurría con el Super Mario Bros. 3. Pero no sé. Grabar cuando uno desea no le quita dificultad, ya que la dificultad del juego radica en el pasaje de las escenas en sí, y sobre el inventario, SMB3 tenía su dificultad (incluso más alta que la de este juego) y sin embargo podíamos seleccionar objetos que íbamos obteniendo. Pero bueno, si le vemos el lado positivo a este aspecto, el juego nos obliga a buscar y rebuscar en escenas ya terminadas para poder encontrar el objeto exacto (que generalmente es el mini Mario o el caparazón azul) para poder pasar por lugares inaccesibles de las escenas y así encontrar sus salidas secretas y demás.
No es el juego perfecto, pero hay que probarlo, sin dudas. Es una gran opción. Le podría un 8.
Hasta la próxima.
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