Hoy vamos a recorrer una sala del Museo no tan llena de
juegos como he mostrado en otras ocasiones. Hoy vamos a acercanos a una saga
de juegos cortísima, pero de calidad, basada en una serie de cómics, de la cual
luego salió una serie de dibujos animados, que cuenta con una versión para NES,
y otra para Arcade: Bucky O’Hare.
Para comenzar, creo que sería necesario hacer una breve
introducción a lo que es la serie de Bucky O’Hare en general, ya que no los
culparía si no la conocen.
Se trata de una serie de comics (del cual luego salió una
serie animada), que se lleva a cabo en universo paralelo llamado “aniverso”, en
el cual se lleva una guerra entre la United Animals Federation y el Toad Empire,
protagonizada por Bucky O’Hare, un conejo verde (que más bien parece una
liebre), líder del grupo compuesto por Jenny, una gata con extraños poderes
mágicos y psíquicos, Blinky el robot, Deadeye Duck, un pato con cuatro brazos
tuerto y Willy DuWitt, un ingeniero pre-adolescente de nuestro planeta que
entró al Aniverso a través de un portal creado sin querer.
Los comics cuentan la historia de las constantes luchas de
estos personajes contra el Imperio Toad.
Mi caso particular con Bucky O’Hare es extraño. Yo sé que de
niño miré esta serie, pero lo curioso es que realmente no la recuerdo en
absoluto. Me acuerdo de alquilar la versión de NES, y saber que se trataba de
un juego basado en una serie de dibujos animados, quizás sea por eso que
inconscientemente recuerdo la serie, o sé que existía.
Pero lo que más nos interesa en este blog son los juegos.
Bucky O’Hare cuenta con dos títulos de buena calidad, por
suerte, desarrollados y distribuidos por Konami, confirmación de que realmente
se tratan de buenos juegos.
Ambas salieron en 1992, una para NES y otra para Arcade, las
cuales comentaré ahora mismo brevemente.
Bucky O’Hare (1992 – NES)
La versión de NES se trata de un juego de acción y
plataformas de gran calidad, como el NES ya nos tenía acostumbrado con joyas
como Contra o MegaMan.
La historia era bastante simple, consiste en salvar al
“aniverso” de la amenaza de los malos, los sapos. La nave de los buenos es
atacada, y Blinky, Willy, Deadeye y Jenny son secuestrados, cada uno en un
planeta: Red, Green, Yellow y Blue.
El comienzo del juego consiste en ir rescatando a los
compañeros, a quienes podrán usar una vez que estén en el equipo (cambiándolos
con el botón select).
Una vez rescatados los cuatro, deberán unir fuerzas para
derrotar a la organización villana.
Cada uno de los personajes tendrá un poder especial, el cual
podrá realizarse al dejar presionado el botón B, y llenando la barra que se
encuentra debajo de la de vida:
Bucky tomará impulso para realizar un salto alto, digno de
un conejo; Flicky, como robot que es, podrá propulsarse con un cohete por un
tiempo limitado; Jenny podrá cargar una especie de bola de energía sobre su
cabeza (como el arma de PharaohMan!) y podrá liberarla para dirigirla a
cualquier lugar y dañar enemigos (aunque ella quedará inmóvil y bastante vulnerable a los
ataques enemigos); Wily cargará su arma para realizar un disparo más poderoso,
y Deadeye podrá caminar por las paredes.
En las escenas, habrá situaciones en las que será más
conveniente usar a un personaje o a otro, así que la estrategia y la
planificación estarán presentes entre tanta acción.
Los fanáticos de los juegos de acción como MegaMan, podrán
encontrar un buen juego en este título. Podríamos ver unos cuantos
paralelismos con esta saga, como elegir la escena y obtener un “arma” (los
compañeros) al terminar cada uno de los planetas. Aún así, a decir verdad, este juego tiene carisma y
personalidad propios. No creo que sea un juego que aproveche el éxito de otros
para usar sus características e intentar sobresalir. Bucky O’Hare es una gran,
gran joya de la NES,
quizás oculta para muchos, y de culto para muchos otros.
El juego se caracteriza, también, por su alto nivel de
dificultad. Realmente propondrá un muy buen reto a todos aquellos que lo
busquen.
No puedo más que recomendárselos, y si quieren otro análisis
más detallado, hecho por mí hace mucho tiempo en Reviews de los Clásicos,
simplemente CLICKEEN AQUÍ.
Bucky O’Hare (1992 – Arcade)
Por otro lado tenemos la versión de Arcade que
tranquilamente podrán encontrar para emular en el MAME.
Con solamente mirar las fotos saltan a la vista las más
grandes diferencias de esta versión en comparación con la recién comentada de
NES.
En primer lugar, lo gráfico, es claro que la versión de
Arcade cuenta con un nivel gráfico bastante superior al de NES. La música, por
otro lado, cumple su función, pero no destaca demasiado, aunque sí es llamativa
la utilización de voces para contar la historia a medida que avanza el juego.
En segundo lugar, resalta el cambio de género: esta vez
estamos ante un Beat’em Up hecho y derecho. Konami fue inteligente: los
comienzos de los ’90, podríamos decir, fue la época de oro de los Beat’em Up en
las salas de Arcdadia, con excelentes exponentes como Captain Commando, Final
Fight, o el recientemente comentado Cadillacs & Dinosaurs.
En cambio, en la
NES estaban pegando fuerte los juegos plataformeros que
incluso ya venían ganando terreno (Contra, MegaMan, Mario, Metroid, etc.). Por
lo que el cambio en la modalidad de juego de Bucky O’Hare entre una versión y
otra es más que explicable y entendible, sin mencionar inteligente.
En cuanto a la jugabilidad, no es más que lo que se puede
esperar de un Beat’em Up: avanzar, golpear, avanzar, golpear. Lo destacable de
este juego es que al menos los personajes tienen armas, pero en el resto es
igual al resto de los juegos del género: saltos, golpes, golpes especiales,
etc.
En este título podremos elegir a cuatro personajes: Bucky, Jenny,
Deadeye y Blinky (estando ausente Willy), también cada uno con sus propias
características a la hora de atacar.
El argumento del juego también cambia, contando que el
planeta natal de Bucky ha sido atacado por los sapos, a quienes tendrán que
derrotar con la ayuda de una “fuerza interplanetaria de vida”.
Más allá de todo esto, creo que nada más sería digno de
mencionar.
Como ven, esta saga de juegos, corta por sobretodo, brinda
dos títulos totalmente diferentes uno del otro. Eso sí, ambos de acción, pero
diferentes en lo demás.
Si me dan a elegir, prefiero mucho más la versión de NES, y
no solo por ser la que conozco desde hace más tiempo, sino por sus
características, sus excelentes gráficos en 8bits, su música pegadiza, su nivel
de dificultad (mucho más alto que el de Arcade), y por sobretodo, porque se
trata de un juego de plataformas, género que me gusta bastante más que el Beat’em Up. A pesar de eso, no
desprestigiemos a esta última versión.
Hasta aquí llega este recorrido por el Museo de hoy. Espero
que haya sido de su agrado conocer un par de juegos basados en una buena serie
ochentosa, que además de goza de muy buena calidad. La versión de Arcade es
curiosa y digna de ser jugada, pero sin dudas, la versión de NES se ha
convertido en un clásico de la consola, con incuestionable calidad, otra
verdadera gran joya del ayer.
Hasta la próxima.
Excelente!
ResponderEliminarSin dudas la versión de NES es muy muy buena... aunque todavía no pude conseguirlo.
Lo tuve de chico y lo devolví a su dueña original.