Grandes Hallazgos: Harry Potter & the Prisoner of Azkaban (GBA)

Corría el año 2004, y en el aire se sentía el furor causado por una nueva entrega de las películas de Harry Potter de aquel momento.

Yo siempre sentí curiosidad por los productos, ya sean juegos, películas, libros, comidas, que causan revuelo en la gente, que se vuelven populares, que llaman la atención de muchos. Por lo que siempre pienso “algo bueno deben de tener”, y con ese motivo me pongo a investigar. Así, más de una vez, he caído en las garras de la franquicia, me he enfermado con la fiebre que ataca a todos, y Harry Potter no fue la excepción…
Como venía contando, vivíamos hace ya siete años, un momento en que casi todos mis primos estaban inmersos en ese mundo del tal Harry Potter, por lo que por curiosidad, así como hice con la saga de libros de El Señor de los Anillos, pedí prestado el primer libro…
Debo admitir que me enganchó, y seguí con sus secuelas, y siguieron enganchándome, más que nada porque cada vez se iba tornando más y más oscuro y maduro. Así que yo fui una víctima más de las historias de Rowling… pero no os preocupéis, que odio tanto como la gente común a esos niños que van al cine disfrazados de Harry XD…

Por el lado de las películas, como dije en esta crítica, las miro para encontrar un mundo visual más real que el previamente imaginado, ya que como argumento, sé que la decepción está a la orden del día, y por el lado de los videojuegos, igual.
Debo admitir que los juegos están… “bien”… en especial los de las consolas “grandes” en 3D, podría decir que los juegos son mucho más fieles a los libros que las mismas películas. Pero como en aquella época yo no tenía una PC digna en la que jugar juegos tan avanzados, debía contentarme con las ediciones de GameBoy Advance.
Estos juegos, que se caracterizaron por ser no tan llamativos, no fueron gran cosa. El primero de ellos era bastante simple y monótono, el segundo no lo llegué a terminar, pero el tercero…

El tercer juego de esta saga para la portátil de Nintendo de 32 bits es quien ocupa hoy el artículo de los Grandes Hallazgos: Harry Potter y el Prisionero de Azkaban (HP3).
He de decir que este juego me sorprendió en muchos aspectos, realmente. Lo primero y principal, estamos ante un RPG. Esto no es nada nuevo, las entregas anteriores también lo fueron, pero este es novedoso. Contraria a mi preferencia habitual a los RPG con sistemas de batalla en tiempo real (como el primer título), HP3 tiene un sistema de batallas por turno, a lo Golden Sun o Pokémon, que, realmente me gustó mucho más que el otro sistema.

Por otro lado, tenemos el aspecto visual, que mezcla excelentemente las caricaturas con dibujos muy similares a los personajes reales de carne y hueso. Digamos que en los cuadros de diálogo, son dibujos más realistas, mientras que los personajes del juego en sí son más caricaturescos.
Por otro lado, los escenarios manejan el sistema de luces muy bien, y las distintas localidades, basadas en las películas o inventadas totalmente, encajan perfectamente con el estilo de juego.
De la música, no mucho que decir, está muy bien, y ambienta excelentemente el juego, por el mundo al que pertenece, no desencaja para nada.

Así que tenemos a HP3, un RPG con un sistema de batallas por turnos, un apartado visual espectacular, y una música bastante buena que ambienta a la perfección.
Como todo RPG decente, podremos jugar con diferentes personajes (aunque el principal es Harry, podremos dividirnos y hacer misiones con Ron o con Hermione, y algún otro personaje que se nos une en un momento de la historia), y los mismos tendrán su propio nivel y habilidad. Harry, por ejemplo, es el mejor para atacar. Ron es bueno con las habilidades que molestan al enemigo, y Hermione es excelente estratega, que curará a sus compañeros o aumentará sus habilidades. Por lo tanto, es un sistema de batallas que hace recordar mucho al Golden Sun, o Super Mario RPG, donde cada personaje tenía una habilidad más especial que los demás.
Tampoco podían faltar la infinidad de objetos y cosas que, al principio, un poco entreveradas, podrán subir características de los personajes o ayudarlos a utilizar algunos poderes en especial. Podrán agarrar ropas, trajes, aditamentos que ayudarán a los personajes a ser mejores.

Como ven, este es un RPG digno de estar en cualquier colección y además de todo, un RPG que podría hacerle competencia a muchos otros que rondan por ahí. Sin embargo, es un juego relativamente corto, pero que se presta mucho a la rejugabilidad, ya que nos permite comenzar desde el principio con los niveles y habilidades con las que se acabó el juego. La división de misiones y objetos ocultos que encontrar dan horas de juego en cantidad.
Otro punto en contra de este juego fue que, a causa de lo mucho que me gustó, puse grandes expectativas en que sus secuelas para GameBoy Advance iban a ser de igual calidad… una sorpresa desagradable fue enterarme de que no fue así. Quizás no sean juegos tan malos, pero no llegaron al nivel de este, dejando al Prisionero de Azkaban como el mejor, sin dudas.

Pero es así de simple. Es verdad que no es el mejor juego del catálogo del Advance, pero sin dudas le hace honor a una saga de excelente calidad (o al menos los libros lo son… ¡lee un libro!) y dejará muy contento a los seguidores de la historia.
Nada más para decir. Este juego interesante, único y novedoso entre sus dos precuelas mediocres, se ganó un lugar entre los Grandes Hallazgos…